Page 85 - Crisis 10
P. 85




































En un homenaje a Luciano Gracia, de izquierda a derecha: Femández Molina, J.M. Sesé, C. Alonso, Benedicto L. de Blancas, J.A. Labordeta, Luciano, Manuel Labordeta y Rosendo Tello. 
Esta foto y la siguiente han sido tomadas de: http://miguel.lorenzo.free.fr/Beneweb/fotos.htm



edades respectivas los encuadrarían estructura unitaria. Es una línea que extrema juventud inicia allí su obra 
dentro de las distintas promociones gusta y frecuenta las vanguardias, poética, hoy muy sólida.

nacionales, desde la llamada Ge- pero que pocas veces aprovecha su Con todo, no se crea —y aviso a 

neración del 36 hasta la más joven técnica experimentalista o los geo- futuros navegantes— en la irreduc- 
entonces, la promoción del 65. Las metrismos del espacio tipográ co. El tibilidad de estas dos corrientes, que 

especiales características con que se mismo M. Labordeta tardará mucho en más de algún caso se entremezcla- 

mani esta este grupo —aparición en utilizar estos recursos visuales, co- ron en fecundo diálogo y se dejaron 
tardía de algunos de sus componen- mo se sabe. De él arrancan los pasos impregnar de interin ujos mutuos. 

tes, enorme vacío e intermitencia en iniciales de I. Ciordia, J. A. Gómez, el Por poner dos ejemplos: la visión su- 

las entregas, independencia frente a que perpetra estas líneas, E. Gastón y rrealista o social a lo Neruda se dará 
modos y modas del momento, desa- J. A. Labordeta.
tanto en M. Labordeta como en M. 

tención por parte de la crítica solven- B) Una visión más realista, más Pinillos, así como el uso frecuente 

te y, digámoslo sin rebozo, ausencia entrañada, en términos generales, con del antipoema. Y el tono y timbre
en tantos casos de una auténtica la realidad del momento. De ahí un de feroz directismo que se apoya en 

calidad, etc.— hacen de estos poetas tono y una expresión más directos, la temática crítica o sarcástica, colo- 

un conjunto difícilmente clasi cable, coloquiales y cotidianos. Además,
quial o cotidiana, será casi común a 
si no atendemos caracteres muy es- del verso libre, estos poetas se sirven todos. Algunos se sentirán incapaces 

pecí cos que parecen dictados por la de metros y estrofas tradicionales y de someterse a la estrecha regulación 

tierra de origen.
su contenido se ajusta más al tipo de del soneto y sentirán rechazo por 
Simpli cando en exceso, diga- poesía social que entonces se estilaba. toda composición rimada o sujeta a 

mos que los poetas de Niké se mue- Es la línea que encabeza M. Pinillos
metros tradicionales que no sean en- 

ven entre dos líneas y maneras de y que siguen, por distintos caminos, decasílabos o heptasílabos.
entender la realidad y la realidad del L. Gracia, G. Gúdel, B. Lorenzo de Niké contó con cultivadores de 

poema:
Blancas, M. Luesma Castán y R. Sa- las más variadas especialidades cultu- 

A) Una visión surrealista que las. F. Ferreró se adentra por cauces rales, literarias y artísticas. M. Labor- 
cuenta con explícitos antecedentes más intelectualistas y puros, al modo deta, E. Valdivia y E. Alfaro escriben 

aragoneses y que halla en M. Labor- de un Salinas o un Guillén, con poe- obras de teatro; Labordeta estrena y 

deta un excitador y formalizador mas de corte mentalista y alejados de publica O cina de horizonte, valiosísi- 
poderoso. El verso libre, la imagen de toda estridencia expresiva. Los poetas ma pieza que dramatiza el destino del 

corte onírico, la incidencia prosaica de la más joven promoción, J. A. Rey poeta frente a un mundo hostil; tanto 

con cierto regusto a lo Vallejo, un del Corral, M. Anós y F. Villacampa, Valdivia como Alfaro, amén de obras 
tinte de celtiberismo visceral, el tono pasan también por Niké. Rey del extensas, conciben deliciosas piezas 

dislocado del poema, siempre de
Corral, asiduo contertulio desde su
breves y farsas, algunas de las cuales,


85

   83   84   85   86   87