Page 98 - Crisis_07

Marcel Duchamp— es más secretada sociales, esa pintura profesional estaba Los aspectos individuales

que oculta. Esas secreciones, esos tan alejada de su propia experiencia, son intercambiables, un cartucho
rastros son, por ello, observables en
que no veían en ella sino una simple jeroglíico diferencia y asigna las
las artes visuales.
convención social, una mera vestimenta identidades; sin la palabra, la imagen

Imaginemos la muchedumbre de la clase que los gobernaba: por
es una cáscara vacía; el individuo está
de las iguras representadas —iguras
eso, en los momentos de revuelta rodeado de signos que delimitan una
humanas— desde los cazadores
social, la pintura y la escultura eran identidad asimilada a la función que

de las cuevas levantinas hasta las frecuentemente destruidas. Durante el ejerce en la sociedad. El personaje
aglomeraciones desmaterializadas de está tanto menos individualizado
siglo XIX, ciertos artistas, por razones
personas anónimas en las pinturas conscientemente sociales o políticas, cuanto más alto es el lugar que ocupa

de Genovés o en las fotografías de intentaron ampliar la tradición en la jerarquía.
Andreas Gursky, pasando por los El asirio Asurbanipal deteniendo
profesional a la pintura, de forma que
personajes de los códices medievales expresara también la conciencia de
al león con sus brazos —en los

y los protagonistas y igurantes de
las otras clases (por ejemplo Millet, relieves del palacio de Nínive—
los cuadros del Greco, Rembrandt o deviene garra o melena. Frente
Courbet, Van Gogh). Sus luchas
Velázquez. Cabe preguntarse en cada personales, sus fracasos y la oposición el hieratismo del humano, el

caso qué identidades se representan que encontraron, son una muestra
movimiento, la materialidad, lo
y cuáles se expresan —obviamente real de la escena, se concentra en
de lo enorme que era la tarea que se
no tienen por qué coincidir—, qué proponían.
el animal. La imagen del rey es un

tipo de sujeto habla encarnado en la signiicante vacío viviicado por una
igura y qué yo emerge en el gesto, la La única manera de romper con miríada de predicados: el que vence

actitud o el tema; cuáles son —en la representación de las identidades al león con sus propias manos, el

deinitiva— las subjetividades que hegemónicas pasaba por dinamitar el que aplasta a sus enemigos, el que
habitan los cuerpos, de qué procesos objeto y el sujeto de la representación. trae la abundancia. La imagen—

de subjetivación proceden esas El arte contemporáneo aparecería
rostro del faraón egipcio y del rey

identidades que se airman en la así como voladura controlada de la mesopotámico como motor de todas
imagen, que pronombres personales representación convencional de las las obediencias y paso obligado en el

se expresan a través de ella.
identidades. Este artículo, en todo orden del mundo.

Y ciertamente el arte ha estado caso, se circunscribe al periodo previo Kuroi, Korai... esculturas que
históricamente tan ligado al poder a esa ruptura.
encarnan paradigmáticamente
“
que apenas ha dejado espacio a la la idea de comunidad. Fascina la

representación y/o expresión de otras La identidad pintada sonrisa en las primeras estatuas
identidades distintas a las ligadas
griegas, la sonrisa arcaica: Giorgio
dominante ha sido en cada “
a ese poder. La identidad pintada Colli sospechaba que era el efecto

dominante ha sido en cada época la época la identidad de la del conocimiento íntimo de ciertas
identidad de la clase dominante.
verdades originarias todavía
clase dominante.
John Berger señala (Mirar, al alcance de los presocráticos.

Barcelona, Gustavo Gili, 2001, Jóvenes atletas y dioses se prestan
p.72) las diicultades del artista Durante los siglos interminables mutuamente su aspecto, relejo

para escapar de las convenciones de la antigüedad preclásica, la tal vez en una conianza creciente

heredadas del secular patrocinio representación está referida a la en lo que habrá de denominarse
artístico de las clases dirigentes:
función y las identidades son logos. “Estos kuroi son iguraciones

genéricas: dioses y reyes, ejércitos y de aquellos a los que se dirigen las

Convenciones relativas a la enemigos, trabajadores en sus oicios palabras de los sabios. Nos queda
e indicaciones del mundo natural. tan sólo una vibración primitiva”
composición, el dibujo, la perspectiva,
el claroscuro, la anatomía, las poses, Las representaciones de personas (Filosofía de la expresión, Madrid,

los símbolos (.que) tenían una concretas en la antigüedad eluden Siruela, 1994 2a de., p.209)
los rasgos individuales y sólo muy Su muda perfección se condensa
relación tan estrecha con la experiencia
social —o en cualquier caso, con
precariamente algunas imágenes después —idealizada, regulada,

las formas sociales— de la clase a la egipcias —familia de Amenois IV ¿perdida?— en la estatuaria clásica
Akhenaton, el Escriba del Louvre— de manera paralela al modo en que
que el servía, que ni siquiera se las
consideraba convenciones sino que se permiten imaginar una vida en el Platón trataría de retener, volcando

creía que era una forma de registrar
interior, más allá de la función y el deinitivamente por escrito el eco del
destino por los que han llegado a la resplandor de aquel saber originario,
y preservar unas verdades eternas.
Sin embargo, para las otras clases
representación.
cribándolo o desvirtuándolo tal vez

98