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los encargantes solicitan. Se recorre
Cristo en Bruselas. Vive la sociale reza la corresponde un grado de potencia. A

el camino hacia una cada vez más pancarta roja que preside la pintura. las relaciones que componen un individuo,
perfecta ejecución técnica y —ya en
Los rostros se han convertido en que lo descomponen o lo modiican,
el barroco— se pone a punto una máscaras grotescas, la distancia
corresponden intensidades que lo

importante relexión sobre la imagen del artista —si la hay— apenas se afectan, aumentan o disminuyen su
y la mirada, pero no parece hallarse
expresa en una cierta elevación del potencia de acción, que proceden de
una relexión estética profunda sobre punto de vista del observador, que no las partes exteriores o de sus propias

una identidad colectiva que parta de por ello es expulsado de la escena.
partes. Los afectos son devenires.
un nosotros. Las condiciones para un
La sociedad se transforma y Spinoza pregunta: ¿qué puede un
cambio se harán esperar.
nuevos modos —más explícitos— de cuerpo? Se llamará latitud de un

El maestro José Luis Rodríguez expresar las identidades acaban por cuerpo a los afectos de los que es capaz
García ha señalado (La palabra y la airmarse, también en el arte.
según tal grado de potencia (.). Del
espada. Genealogía de las revoluciones, “mismo modo que se evitaba deinir un

Madrid, Talasa, 1997) cómo es en el cuerpo por sus órganos y sus funciones,
contexto de la Revolución Francesa La naturaleza muestra
también hay que evitar deinirlo por
cuando se apunta un giro decisivo. las debilidades de una razón caracteres Especie o Género: se intenta “

“Ya la pictorización davidiana del contar sus afectos. A ese estudio se
Serment du Jeu de paume lo avanza: los que no puede abarcarla.
llama “etología”, y en ese sentido
brazos extendidos de los asistentes Spinoza escribe una verdadera Ética.

apuntan a un centro innominado que Hay más diferencias entre un caballo
es la emergente voluntad general.
de carrera y un caballo de labranza
(.) Se extiende la colectivización
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que entre un caballo de labranza y

de la identidad”. En esta obra de Deleuze y Guattari, a partir de su un buey”. (Mil Mesetas, 260—261, las
Jacques—Louis David se expresaría interpretación de Spinoza, plantean
cursivas son mías).
novedosamente una “mirada que una nueva mirada sobre el cuerpo

trenza una supraindividualidad que pone en cuestión los habituales Debordarse, superar al
fortalecida, emergente, andamiajes de la identidad. El cuerpo observador todoroviano, para incluir

constituyente” (p. 140). Es un giro se expresa como longitud y latitud.
un mundo que se torna despojado

que, sin embargo, apenas dejará En la longitud se abre, incorpora de la ejemplaridad satisfecha y
rastro en el arte. El propio Juramento exteriores que se componen con él, doctrinaria del barroco, alejada de

es una obra inacabada, frustrada, que son él y rebasan la topografía la vacuidad rococó y de la frialdad

abrasada por su excesiva cercanía
orgánica. La latitud le desengancha moralizante de los neoclásicos,
al núcleo de los acontecimientos de las funciones, le libera de las desenganchar la representación

políticos: antes de que se termine de taxonomías y los saberes y poderes del ejercicio de orgullo gremial de

pintar, algunos de los protagonistas que a través de los discursos los artistas del Antiguo Régimen,
retratados ya son tenidos enemigos normativos se ejercen sobre él y le tal es una de las labores del artista

de la revolución, traidores explica en función de las relaciones romántico. La exterioridad deja de ser

desenmascarados. El Cuarto Estado, —afectos—, y de las intensidades objeto separado para la razón —ente
obra de un oscuro artista piamontés, que las acompañan, aumentando o domesticable— y se problematiza:

Giuseppe Pellizza da Volpedo en
disminuyendo su potencia de actuar. invade y desplaza la cómoda relación

1901 podría cerrar el ciclo apenas un Los caballos de labranza se mezclan interior—exterior propia de la época
siglo después. El cuadro es el gran con los bueyes, sus semejantes, lejos clásica.

icono del proletariado en marcha. ya de los caballos de carrera.
La edad contemporánea

Pero no hay rastro de un nosotros;
plantea con claridad un cambio
la distancia prevalece. La multitud de las relaciones entre lo interior
“Se llama longitud de un cuerpo
avanza; el testigo situado enfrente de —escriben— a los conjuntos de y lo exterior de los sujetos que

ella señala: ellos, ellas, los nuestros, pero partículas que forman parte de él bajo permitirá nuevos agenciamientos y
no hay un nosotros: el espacio teatral afectos, y abrirse a nuevas formas
tal o tal relación, conjuntos que a su
que media entre el pintor y lo pintado vez forman parte los unos de los otros de subjetivación. La pintura

deshace la posibilidad. Apenas
según la composición de la relación que romántica lo expresa con claridad.
una década antes, el pintor belga Rafael Argullol (La atracción del
deine el agenciamiento individuado
James Ensor, había mostrado a una de ese cuerpo. En Spinoza hay otro abismo, Barcelona, Acantilado, 2006)

muchedumbre bien distinta, la masa aspecto. A cada relación de movimiento reiere la centralidad de la pintura
carnavalesca —festiva y tenebrosa al El monje frente al mar de Caspar
y de reposo, de velocidad y de lentitud,
tiempo— de su cuadro La entrada de
que agrupa una ininidad de partes,
David Friedrich para localizar estos

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