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La historia de la humanidad es bién son cuarenta los días de Cristo de la ciudad destruida, navega por el

la historia de la supervivencia. La en el desierto. Y los que componen Mediterráneo y por el lecho de Dido,
especie ha sobrevivido a pesar de é
la Cuaresma en la liturgia cristiana: reina de Cartago, a la que abandona
plagas, diluvios y demás castigos con úícuarenta días antes de la Pascua se para cumplir su misión impuesta

que los dioses han pretendido siem- ávive un periodo de ayuno y contri- por los dioses. El nacimiento de
pre mostrar su poder por encima de ú
áción, antecedido por el Carnaval. Roma será un resurgir de Troya y
los pobres mortales. Cada humano éíUna cifra, cuarenta, de peregrinaje, del mismísimo Olimpo: Eneas es
é
muere, pero la especie sobrevive, exterior o interior, para llegar a la hijo de Afrodita, diosa de la belleza,
cosa que no está tan clara en el caso óí
áítierra prometida, al templo, a la del amor, beneficiaria de la famosa

de los dioses: de muchas deidades ópurificación interior, es decir, para y discordante manzana que provocó
ñí
del pasado ya casi nadie se acuerda: éúíregresar el paraíso perdido.
la guerra de Troya. La fundación de
Baal, Astart, incluso Isis y Osiris ííLa mitad, o una cuarta parte de
éRoma por parte de Rómulo y Remo,
forman ms parte del acervo artísti- ese número, son los años que pasa los gemelos descendientes de Eneas,
íé
co que del religioso. Tal vez ese fuera Ulises antes de regresar a su patria, cierra el ciclo. La nueva ciudad es
su cometido principal, formar parte Ítaca: veinte años desde que se va a
áuna vuelta a Troya. Una vuelta a
de la humanidad a travs de lo que luchar en la guerra de Troya, diez Afrodita, nacida de la espuma del
í
le es ms esencial: la necesidad de desde que termina la contienda. mar que surcan las naves de Eneas.
supervivencia, es decir, el Arte.
áVive un periplo por el Mediterráneo,
El mar al que mira la reina Dido
¿Por qu creamos, contempla- entre cíclopes, tormentas y brazos antes de arrojarse a la pira porque

mos o buscamos Arte en nuestra femeninos hasta llegar a su casa, íno puede soportar vivir sin el amor
vida? Tal vez porque la conciencia donde lo espera Penélope, que teje
éde Eneas. Para ella no habrá retorno
é
de que somos mortales nos lleva a y desteje una suerte de eterno tapiz éíposible.

buscar la inmortalidad, y el Arte es para mantener su fidelidad a uno de Sí lo habrá para otra mujer: la
nuestra nica opcin de ser inmor- los maridos más infieles de la histo- diosa Isis viaja por el Bajo y el Alto
ó
tales, es decir, de sobrevivir ms all ria. Sus mentiras y triquiñuelas son óEgipto para recuperar los pedazos
ñó
de nuestra vida corporal. La historia a veces castigadas, a veces premiadas édel cuerpo de su esposo y hermano
y la literatura estn llenas de super- por los dioses. Pero acaba llegando
Osiris, insuflarle el hálito de la vida

vivientes, pero tambin la pintura o a su tierra prometida a pesar de to- áúde nuevo y hacerlo inmortal. La
ñá
la msica... De eso vamos a hablar das las incertidumbres y a pesar de íresurrección es final y comienzo de
brevemente en estas lneas.
haber perdido a todos sus hombres. áviaje en las religiones en las que se

Todos somos peregrinos en la El hroe no es tal. Ulises es un hom- ácuenta con ella. La resurrección es

tierra. La vida no es sino un pere- bre lleno de debilidades. Ulises es el regreso y esperanza de eternidad.
grinaje, un intento de retorno al smbolo de la soledad del hombre íEs recuperación de aquello que los

paraso perdido. Esa necesidad de en el mundo: uno est solo, aunque íhumanos perdieron al pretender

supervivencia queda reflejada en est acompaado. Es Adn desterra- comportarse como dioses.

algunos hitos legendarios y literarios do. Pero es un Adn que cuenta con También hay un viaje, esta vez

que muestran que, de un modo o de dioses favorables: el monotesmo del de cinco años, entre la primera y la

otro, vivir es regresar.
Gnesis no permite personajes divi- segunda parte del Tenorio de Zorri-
Los cuarenta aos en el de- nos antagnicos. Solo Lord Byron
lla. Cinco años que provocan la su-

sierto de los judos hasta llegar a la se atreve a darle la palabra a Luzbel, pervivencia inmortal del personaje.

tierra prometida son un smbolo de que dice a los humanos esa frase Don Juan vuelve a Sevilla arrepenti-
ese peregrinaje. El nmero cuarenta cuya resolucin habra implicado do después de un periplo por lugares
ó
tiene desde antiguo el significado que no estuviramos hablando de que desconocemos. Ese arrepenti-

de la purificacin: despus de dar a parasos perdidos: «Yo os habra he- miento y la mediación de doña Inés ó
luz, la mujer sufre un sangrado que cho dioses».
proporciona la salvación del perso-

dura unos cuarenta das. De ah la El viaje de Eneas desde Troya naje. Igual que la virgen María pro-

palabra «cuarentena», de infausto hasta Roma antes de que Roma cura la salvacin de la humanidad, Í
recuerdo durante el periodo en el exista es otro ejemplo de peregrino: al regalarle al hijo de Dios, y con él la é

que escribo estas lneas. Durante Eneas viaja con su padre a la espalda resurreccin y la promesa de la vida

esos cuarenta das, las mujeres re- y con su hijo pequeo de la mano: eterna perdida en el Gnesis.

cin paridas no podan ir al templo las tres edades del hombre en plena Y no olvidaremos los viajes

porque eran consideradas impuras. peregrinacin para encontrar un de Don Quijote desde La Mancha á

Por eso tenan que esperar ese tiem- nuevo hogar que an no ha sido hasta La Mancha. De nuevo el viaje
po para ser consideradas dignas de creado, y que tendr que ser funda- circular, el regreso a taca. Tras tres

visitar los lugares sagrados. Tam-
do por sus descendientes. Eneas sale
salidas desde su casa y viajes ms o

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