Page 70 - Crisis 10
P. 70
La red es la niña salvaje (Pilar Catalán)
una perspectiva feminista, recha- de incluirlas en la historia del arte. siciones solo a rmaban las tesis del
zando al estatus de genio como Pero encontraron una réplica con- determinismo biológico”.
concepto predominante en el canon tundente de Rozsika Parker y Gri- Considerando el feminismo
estético hegemónico y con una selda Pollock criticando duramente como un movimiento social y polí-
interrogación que quedará como el proceder de las comisarias por tico que ha exportado las claves que
una denuncia y una demanda per- entender que la exposición, si bien más han contribuido a la re exión
manente: ¿cómo es posible escribir conseguía el logro de incluir a las y a la apertura de intervenciones
una historia del arte en la que las artistas en el catálogo de la historia, de deconstrucción y la creatividad
mujeres, la mitad de la humanidad, no arrebataba el aura al logocentris- que ha asumido en nuestra época
ha sido excluida?
mo y por tanto mostraba una evi- nuevas responsabilidades experi-
A partir de este texto pionero dente contradicción con los escritos mentando con narrativas no lineales
las artistas feministas e historiado- de Nochlin.
y colaborando de manera activa en
ras del arte despliegan diferentes Estas posturas divergentes y la creación de un ideario ciberfemi-
estrategias cuyos nes se centran, encontradas conviven todavía en
nista, vamos a de nir cuáles son los
por un lado, en la visibilización de el presente en la línea de visibiliza- códigos emergentes en la sociedad
la obra y, por otro, en un posicio- ción. Artistas feministas como Judy de la información; resultado del
namiento radical encaminado a Chicago y Miriam Chapiro concre- vínculo establecido por la escritora
deconstruir sistemas conceptuales taron su trabajo en representar lo y doctora en Bellas Artes Remedios
y antiguos lenguajes, discrepando femenino universal, convencidas
Zafra entre mujer artista y mujer fe-
de forma exhaustiva de aquellos de la existencia de una ontología minista y la adhesión incondicional
parámetros y enfoques más con- inherente a las mujeres –así la obra desde la década de los 90 a la tecno-
taminados y androcéntricos. En The Dinner Party de Judy Chicago, logía como parte consubstancial de
este sentido Linda Nochlin y Anne 1979– y por tanto la validez de una la cultura humana.
Sutherland organizan en 1976 la estética feminista, argumentos que La expansión de internet a
exposición Women Artists con 150 chocaban directamente con los de partir de los años 90 en los países
obras de 86 artistas con el objetivo
Griselda Pollock, “ya que tales expo-
más desarrollados, va a replantear
70