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sociopolítica bajo el riesgo de seguir En su multitud de vertientes, sociedad en que vivimos aceptando

un proceso fractal infinito. Esa frac- desde los principios de la historia, la la realidad del arte en un mundo sin
ó
tura afecta al ser humano tanto como cultura tiene que superar su propia dioses. Somos la parte costurada del
la naturaleza y ambos desarrollaran ómetástasis, aunque esté desnuda, y ser y nuestras terminaciones nervio-
é
sus propios síntomas —a veces im- íreivindicarse a si misma con las armas sas manifiestan una impertinente
previsibles— de enfermedad global que le corresponden: la imaginación capacidad para imaginar algún sueño

y desbordamientos caóticos de los óíy la creatividad, contra viento y ma- y cuidar la relación con nuestro cuer-
í
espacios que le son propios, tal como órea, como antídoto. Pues la cultura
po, porque de algún modo creemos
hace la naturaleza con la virulencia es política, como el arte también lo que es un ente inteligente.

óí
de su fuerza incontrolable. La pau- es, y si no ¿qué hacen esas obras en
«Pintar es dirigirse cada día hacía

latina manipulacin interesada y la las paredes de fondo en toda reunión la fuente a buscar el agua: la luz. Pintar
de los poderes al servicio de sectores institucional?
es salir de sí mismo, olvidarse, preferir
“
exclusivos, al lema de «camino libre» el anonimato y no estar de acuerdo con
ó
que utilizan las fuerzas especiales sin el siglo, las modas ni los semejantes.
la convencin de los recursos legales la cultura tiene que Pintar es principalmente querer cono-
í
necesarios igualmente mediatizados. superar su propia metástasis, cer y hacer todo lo posible por conse-
á
Estas circunstancias, como todos aunque esté desnuda, y guirlo». Nos indicó Balthus.

sabemos, son el caldo de cultivo para Las lagunas de la transparencia
reivindicarse a sí misma

una crisis ecolgica que sufrimos política y el axioma actual de lo “

con las armas que le
atnitos y paralizados y que, en gran políticamente correcto son, según
parte, es la causa de esta pandemia; corresponden: la imaginación quienes colmados en las ramas de
í
caricatura grotesca del teatro del ab- y la creatividad
élos árboles protegen su superviven-

surdo, irracional y obscena; «Quiz ícia exigiendo que nademos sobre
sea necesario que las cosas estallen en espejos de cristal para suplir una
á
pedazos para poder empezar de nue- La cultura también es síntoma transparencia imposible, las nuevas

vo» qu deca Antonin Artaud, quien del cuerpo social y a la vez la mejor normativas sistematizadas sobre la
no poda imaginar el parentesco tan vacuna. Para renacer no se puede es- ópalabra imagen. Aspirando a una
ó
acusado de sus palabras, salvando las tar muerto del todo, y se deben apro- úébanal igualdad y una oportunista

distancias, con la pandemia de este vechar las vibraciones de la voz y la virtud del otro para así proteger
coronavirus actual.
mano. El arte, por su parte, qué es lo intereses bruñidos, pues nunca se
íó
Cultura en la sangre como con- que a m como artista me afecta, quie- óacaba lo que se empieza.

secuencia de todas estas pesadillas. ra o no, est vinculado a esta espiral El sentido de ser del arte es dar a
La cultura se desplaza de su lugar,
pandmica como lo ha estado siempre luz, entre otras cosas, al lado oscuro.
í
sin espacio y paralizada, sin recursos a la historia del arte; la historia del éÁO, dicho de otro modo, a la poética de

econmicos muchos de los cuales han mundo. Considero que los artistas las sombras tanto como cantar las ale-
sido esquilmados por intereses parti- somos la expresin del sntoma del grías de la vida y las cosas. Joie de vivre

distas y particulares por depredadores cuerpo social y hace tiempo que lo como tituló Matisse un cuadro suyo.

con un individualismo desenfrenado; estamos anunciando de muchas ma- El arte es la manera de nombrar lo
quienes nos han metido en cierta neras, antes del empoderamiento de innombrable. Si esas contradicciones

irracionalidad y violencia minando el la incertidumbre, como labradores sin y esas palabras no pueden ser pronun-

derecho al conocimiento.
perro. Guilles Deleuze, a quien ya me ciadas por condicionantes políticos
En definitiva: expuestos a cual- he referido en otras ocasiones, nom- interesados de coyuntura, entonces el

quier enemigo invisible que nos traiga bra el arte como la ltima forma de artista ha muerto. Si tiene que redu-
ó
contagios, epidemias y pobreza dispues- resistencia posible a la dictadura del cirse a espacios dictados, entonces, el
tas ha hacer bien su trabajo, salidos de la lenguaje y la comunicacin superfi- artista ha muerto.

caja de Pandora como los viejos titanes cial. El arte es una forma de hablar, de El arte ¡cmo no! padece su pro-

de la mitologa griega o las plagas del pensar y de comunicar ajena. La for- pia pandemia, y acabaremos deste-
antiguo Egipto, pero sin bastn que se ma de mencionar el Pathos y alterar lo rrados como zombis convertidos en

lo ordene. Y es aqu donde la cultura sagrado, vinculado a esta esperpntica testigos nativos del calentamiento del

sale dignificada, y no me refiero a la cul- ceremonia de poder y muerte. «vida planeta Arte. Recordemos; la imagen
tura capitalizada al servicio del negocio Dollars» que Andr Bretn dira de atrapa y hace propuestas de infinito.

empresarial, sino a la que es intrnseca Dal para la perpetuidad de la nada Por tanto, si consentimos que nos

a los valores universales y espanta las suicida, como bigrafos involuntarios impongan discursos verticales... el
tinieblas de los pueblos y sus gentes, la de los sentimientos y las emociones artista ha muerto.

independiente y de base.
ordenando los restos rotos de una
¡VIVA EL ARTE!

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