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Los medios de comunicación viven las mujeres, del mundo de las En ese camino, los medios de co-

siguen cumpliendo su función como relaciones de desigualdad y de quienes municación y, con más propiedad, las
agentes socializadores del sistema
mantienen e impulsan esta situación.
personas que tienen que ver con ellos,
patriarcal, por cierto en dura com- El reclamo de un mundo alterna- desempeñan un papel fundamental

petencia con la familia y la escuela; tivo en el que hombres y mujeres, de como agentes de una nueva socializa-
pues la televisión, y en cierto modo la
todas las edades, etnias, culturas y reli- ción, más rica en valores de equidad y
radio, se han convertido en una im- giones, tengan igualdad de derechos y más respetuosa.

portante fuente de captación de ideas equidad en sus relaciones, es alentado Aunque los grandes cambios
en el entorno familiar.
y también percibido desde distintos vienen dados por grandes movili-
El poder de los medios de co- enfoques: desde quienes ven el asunto zaciones y por grandes decisiones,

municación es de tal magnitud que como algo utópico, inalcanzable; quie- algunos pasos se pueden ir dando
podemos airmar, sin temor a equivo- nes resaltan que los derechos de las
desde espacios más inferiores. Por
carnos, que las percepciones y opinio- mujeres deben ser tenidos en cuenta al ejemplo, en el uso del lenguaje en

nes sobre los asuntos sociales están igual que los de los hombres; quienes los medios de comunicación, pues si
condicionadas y, en muchos casos, lo miran como asunto de feministas, o
la lengua es el instrumento funda-
deinidas por la forma en que los quienes se ciñen a la letra impresa de mental de la comunicación humana,

medios de comunicación enfocan las los tratados internacionales de dere- hace falta desarrollar un periodismo
noticias, hasta el punto que resulta chos humanos para decir que “por ahí no sexista, no hace falta reinventar

difícil, incluso, establecer diferencias vamos progresando”.
el lenguaje; se trata de eliminar la
“
entre el acontecer real y la realidad continua difusión de la imagen se-
reconstruida por los medios a través cundaria, negativa y degradante de

de su información cotidiana.
No se trata de un las mujeres y diseñar una estrategia

Fieles a su tarea, los medios re- asunto de mujeres frente a de información que tenga en cuenta
producen los estereotipos patriarcales a hombres y mujeres en todas las
hombres; ni de demandas “
de la sociedad y a la vez los impulsan esferas de la vida, con equidad.

haciendo entender que el mundo es que se ponen en un texto.
Sin embargo, dicha estrategia
así, que los espacios públicos, por lo debe pasar hoy por hoy por la exal-

general, están ocupados por los hom- tación de la actividad de las mujeres,

bres y son ellos los que hacen la His- de sus preocupaciones y sus puntos
toria y protagonizan las noticias del No se trata de un asunto de muje- de vista, con objeto de hacer visible

ámbito político, económico, social, res frente a hombres; ni de demandas su accionar más allá de la esfera de

cultural y por supuesto deportivo.
que se ponen en un texto, lo irman lo privado.
En consecuencia, las mujeres todos o casi todos los países y ya está. También es necesaria una ac-

quedan por lo general invisibles en la Sí que tiene mucho que ver con la uto- titud de denuncia constante de las

construcción de la Historia, apartadas pía en la medida que las fuerzas con- distintas formas en que se refuerzan
de los acontecimientos trascendenta- trarias son muchas y muy fuertes, que los estereotipos hacia las mujeres,

les, y relegadas a las páginas de modas, además no están localizables sino que desde la publicidad hay que combatir

de sucesos, a los programas sobre te- están impregnadas en todos los seres la imagen de las mujeres como objeto
mas irrelevantes, y a mostrar sus cuer- humanos. Por ello la consecución de de promoción mercantil, desde los

pos como recursos publicitarios.
una sociedad mundial que “libre” de magacines de televisión hay que anu-

Cierto es que hay mujeres que opresión a las mujeres, a la infancia, a lar la presencia pasiva de las mujeres
participan de la actividad política
las gentes de otras etnias o creencias, y promocionar sus valores personales

y económica, y que aparecen en los se puede ver como algo utópico.
más allá de la belleza física.

medios dando su opinión, pero, salvo Podemos airmar que se trata de En esa línea ética, el poder de
honrosas excepciones, su discurso no un asunto de “salud democrática” los medios de comunicación irá

suele venir desde la óptica del pensa- pues la concepción original de la conformando una opinión pública

miento de las mujeres; dicho de otro democracia, tan desvirtuada en la más democrática y su papel como
modo, las mujeres con carisma públi- actualidad, supone la existencia de agente socializador favorecerá la vi-

co no suelen hacer valer esa condición una sociedad igualitaria y respetuo- sión de las mujeres (por parte de los

para promocionar la participación de sa. Para caminar hacia esa democra- hombres y también de las propias
las mujeres y denunciar las distintas cia saludable, es preciso recuperar o, mujeres), como personas con virtu-

formas de opresión hacia ellas.
mejor dicho, reconducir, un cúmulo des y defectos, con opinión, con es-

En deinitiva, los medios carecen de valores, una ética que nos permi- trategias, con voluntad de contribuir
de un análisis serio y, en consecuencia, ta vislumbrar la posibilidad de obte- junto con los hombres a mejorar la

de la denuncia del contexto en que
ner resultados.
relación humana.

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