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Los duros tiempos que estamos echamos de menos. Están poniendo fundamentales de Louis Malle, 

viviendo están poniendo a prueba la áa disposición de los pocos jóvenes Adiós muchachos y Lacombe Lucien, o 
resistencia no solo de las personas, ñ
íóóíque aún piensan que el cine es a El último metro, de Truffaut, sin olvi- 
sino de las empresas, los negocios
óéveces el séptimo arte, películas de dar El ejército de las sombras, de Jean 

y las variadas formas de expresión áóámaestros incuestionables como Felli- Pierre Melville, título que no puede 
artstica y cultural.
ó
ni o Kurosawa, o recuerdan estrenos ser más expresivo respecto a lo que 
El cine es una de ellas. Siendo de hace cien años —“El chico”, de fue ese movimiento inspirado por

í
como puede llegar a ser un arte y íáChaplin, por poner un ejemplo— y el General De Gaulle desde su exilio 
desde luego una forma de expresar- áúé
íestán haciendo una labor de aposto- inglés.

se, es fundamentalmente una indus- álado con su innegable fondo egoísta Un subgénero que ha tratado 

tria que debe atender a su cuenta de ípensando en cómo mantener en el las peripecias de seres humanos que 
resultados. Y esa industria ha sido éóófuturo sus empresas.

átienen que resistir en condiciones 
daada en su lnea de flotación, obli- Se dirá que es una batalla per- extremas es el de los campos de con- 
éíú
gndole a aplicarse en un ejercicio dida. Puede ser. Parece evidente que centración o de penados. Incide este 
de resistencia a la espera de que el nada, absolutamente nada de lo 
tema en lo mismo de lo que hablába- 
temporal amaine.
áque a finales de 2019 teníamos por mos en el número anterior, dedicado 
úí
De momento, resistir el que normal, seguirá exactamente igual a la supervivencia, con la que com- 
pueda, en la esperanza de mantener íel día que esto acabe. El cine, enten- 
parte argumentos.

viva la llama del inters de la cliente- dido ahora de forma global, o sea Cada uno tiene sus preferencias 

la, para aspirar a un hipottico rena- su realización, su distribución y su sobre este tema, pero me voy a per- 
cimiento en un futuro que nadie se exhibición, no tiene por qué ser una íúmitir remarcar algunos ejemplos, 

atreve a aventurar si es cercano o no.
excepción.
seguramente no los mejores, pero sí 
é
La parte ms cercana que ve- Parece evidente que muchas de ásuficientemente buenos: la impac- 
mos nosotros, los consumidores, es las salas ahora cerradas no reabrirán. tante El pianista, de Polanski, la di- 
í
la que compete a las salas de exhi- Tambin es obvio que el cine visto ávertida Ser o no ser de Lubitsch, y la 

bicin. Buen nmero de ellas han en casa no solo es arrollador presen- curiosa Los falsificadores, una austria- 
cerrado —dicen la mayora que pro- te, sino innegable futuro, pero opino íca que hace 14 años ganó el óscar a la 

visionalmente, el tiempo lo dir—, que quedarn salas de exhibición y mejor película de habla no inglesa.


ya que ha descendido el nmero de all veremos otro tipo de cine, menos íCuenta la historia de unos pre- 
asistentes, bien por miedo, bien por multitudinario, incluso más selecto. úsos en el campo de Sachsenhausen, 
óí
precaucin, sin olvidar que ese p- Un tipo de cine que a los buenos a las afueras de Berlín, que fueron 
ú
blico que hace masa y por tanto hace aficionados —y haberlos, haylos— ñobligados a falsificar moneda extran- 
cifras no tiene productos a su dispo- incite a salir de casa «para ir al cine».
jera, libras, sobre todo, para hundir 

sicin de los llamados blockbusters, y Y si alabamos el ejercicio de re- ñlas economías rivales. Eran impreso- 
éíé
perdn por la expresin.
sistencia —nuestra palabra de este res e incluso auténticos falsificado- 
Se puede observar que la ma- nmero— de los profesionales del res, y consiguieron salir indemnes al 

yora de las salas que permanecen cine, el vocablo agita mi mente de prolongar hábilmente su trabajo, ya 

abiertas lo estn al ser los exhibido- conspicuo espectador durante dca- que daban por hecho que al termi- 
res propietarios de los locales y no das para evocar las mltiples pelcu- narlo serían eliminados.


tener que pagar alquileres. Redu- las que han tratado ese tema, el de Tuve la oportunidad de visitar 
ñ
ciendo personal y ajustando de aqu la resistencia. Y aqu hay que aadir ese campo, ahora convertido en 
y de all han podido permanecer casi siempre «francesa».
pequeo museo de los horrores, y 

abiertos, buscando la fidelidad de Lo que hicieron buena parte de hacerme una idea de lo que tuvo que 

unos cuantos cientos clientes a base nuestros vecinos del norte durante ser resistir en aquellas condiciones.

de estrenar ttulos que posiblemente la guerra lo haban hecho y lo han Nosotros también hemos sido 

no hubieran llegado en circunstan- seguido haciendo buen nmero de impelidos a resistir, lo hemos hecho, 

cias normales, as como reponiendo pueblos que han sentido hollada su lo estamos haciendo y lo seguiremos 
en versin original ttulos famosos tierra, pero son ellos los que se han haciendo, porque quien resiste es el 

de dcadas pretritas.
quedado con la expresin completa. que luego lo cuenta.


Estn resistiendo, y se agradece, Y en ocasiones la han contado muy 
para evitar que la aficin a ir al cine, bien.


que no es lo mismo que a ver pel- A partir de los setenta se hicie- 

culas, no se pierda. Estn haciendo ron filmes que se atrevan a mostrar 
incluso una labor propia de esos ci- algo ms que simples hazaas b- 

neclubs que los ms veteranos tanto
licas, y as pudimos ver dos obras



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