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Ciertas incertidumbres



Se cuartearon todos los esquemas

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Carmina Martín


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Asentados en el confort y la ilusión de una seguridad ilimitada, no percibimos nuestra 

vulnerabilidad ante los imprevisibles cambios adversos.









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Actuamos como si furamos nos sentimos abrumados por la in- éuna tiza; no era el zumbido de un 

capaces de anticipar los hechos y certidumbre.
mosquito ni tampoco el concierto 
ajenos a los imprevistos incmo- Aquella maana del 7 de agosto de percusión de una cigarra; el reloj 

dos; a veces, incluso, nos creemos sentas tenerlo todo bajo control;
del salón no ofrecía desde hace me- 

capaces de cambiar el rumbo de la tu da estaba planificado, perfecta- ses su tic tac: sin haber averiguado 
historia.
mente estructurado. Tus vecinos todavía la razón el cambio de casa 

Creamos nuestra zona de ms cercanos se haban marchado lo había dejado mudo.

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confort, ese espacio trazado con
de vacaciones; escuchabas el silen- 
el mayor esmero matemtico, un cio mientras saboreabas un caf, 

territorio donde la incertidumbre, cuando esta nada —que en algunos La vida va cambiando
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la escasez y la vulnerabilidad son momentos colma todos nuestros y en el momento en que las 
mnimos, en el que creemos que anhelos— fue perturbada por un “

cosas dan un giro inesperado 
hay espacio suficiente para el amor, estridente sonido que martilleaba á
nos sentimos abrumados por 
la comida, el talento, el tiempo o la tus odos.

admiracin. Un lugar donde cree- Cerrabas los ojos intentando 
la incertidumbre
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mos tener todo controlado; nos afe- ubicarlo en diferentes espacios: no 

rramos de forma natural al mundo era el sonido bajo, apagado e inago- í
conocido, a lo previsible; tenemos table del grifo que gotea; nadie ara- Te das cuenta, entonces, de


la asombrosa capacidad de olvidar aba un plato con los cubiertos; las que el mundo est lleno de sucesos 

una gran certeza, y es que la vida va aulas del colegio cercano estaban inesperados, y acompaando al so- 
cambiando y en el momento en que cerradas; por lo que no haba nin- nido de la ambulancia se oa su voz, 

las cosas dan un giro inesperado
gn nio que raspara la pizarra con
esa vibracin en sus cuerdas vocales



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