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ir los tiros, que la visión de aquello emprender la visión de una obra o peor. La abundancia de infor-

que se le muestra no esté exenta de ícinematográfica.
mación —con la desinformación
eso que es el lema para este número
óíQuienes ya llevamos varios interesada que lleva implícita—,

que tienen entre manos: de incerti- miles de visionados en nuestros el enorme caudal de referencias
é
dumbre ante lo por venir.
ígastados ojos y nuestras no menos acumuladas en la memoria, el es-
Me ha parecido este recorda-
ágastadas neuronas recordamos con cepticismo propio de la edad y el
torio de las declaraciones de la ííplacer y nostalgia los tiempos en relativismo que nos invade compo-

argentina una posible forma de élos que nos aventurábamos en las nen un corpus donde las sorpresas
abordar la propuesta para este nú-
ómodestas e incómodas salas —al raras veces nos asaltan y en el que
mero y adaptarla al tema del que ósentir actual, que entonces no nos las certezas han arrumbado su an-
ááá
suelo escribir desde que comencé ñílo parecían tanto— sin saber muy títesis, esa incertidumbre que como
mis colaboraciones con la revista, bien qué íbamos a ver, pero ilusio-
éávocablo para este número ha elegi-
el cine.
nados... y sin muchas certezas.
do nuestra dirección.

óó
Porque si buscramos en la áóáSolíamos ir al cine sin muchas Dando un leve giro a estas lí-
historia del sptimo arte algún tí- ñéúreferencias sobre lo que íbamos a
óóóneas podríamos asociar la palabra
tulo que incluyera el vocablo en su ver. Nos guiábamos por el renom- de marras con un género que suele

ttulo no creo que encontrramos éíbre de sus actores —lo de fijarse
tener gran aceptación entre el res-
alguno ms que el hermoso utiliza- en el director llegó mucho más tar- petable, el suspense. Esta expresión

do por el veterano Manoel de Oli- de—, porque el género nos gustara comenzó a popularizarse cuando

veira, prolfico director portugus o simplemente porque los carteles Hitchcock invadió pacíficamente
fallecido a los 106 aos y capaz de nos parecieran sugerentes. Había, ñnuestras pantallas. Su auténtica

firmar pelculas hasta un ao an- pues, incertidumbre, aunque acom- traducción al español sería “suspen-
íí
tes de morir. En 2002 titul uno de paada de ciertas dosis de espe- so”, pero la acepción más utilizada
sus trabajos como El principio de la ranza de no vernos defraudados. óde esta palabra no cuadra precisa-
áí
incertidumbre, que no s si tendra En el fondo esta situación acababa ímente bien para calificar una obra

mucho o poco que ver con la trama por ser positiva en muchos casos, íartística, con lo que el vocablo an-
ya que no recuerdo que fuera estre- ya que estbamos más abiertos a la éíglosajón acabó imponiéndose. Esta
ñ
nada en nuestras pantallas y no he sorpresa y con ella, por qué no, a la ñactitud de mantenerse “en suspen-

tenido la oportunidad de hacerme fascinacin cuando la película nos so” es perfectamente comparable a
con ella.
llenaba.
ála incertidumbre, ya que el especta-
“ó
Tras estos prembulos que dor no debe tener claro en ningún
í
bien pueden ser tildados como momento sobre el devenir de la “

simple exhibicin de erudicin Solamos ir al cine sin trama. Sería buen momento para

memorstica, por otra parte, discu- muchas referencias sobre lo úextenderme sobre la figura de Don

tible, ya que basta con sumergirse que bamos a ver
Alfredo, pero eso lo dejaremos para
en la inmensa informacin a la que mejor ocasión. Solo querría añadir
é
cualquiera tiene acceso, qu decir que a quien suscribe la noticia de su

de lo que como aficionado al cine Ese momento mgico cuando figura le llegó a través de sus proge-
me sugiere el reto de este nmero, comenzaba la proyeccin, general- nitores por la sencilla razón de que
é
sino que me remite a sus sinni- mente con la cabecera de la pro- todas las películas eran para ma-

mos como duda, vacilacin, inde- ductora —quin no guarda en su yores. Por tanto, mantuve durante
cisin, por no irnos ms lejos.
memoria los smbolos y las msicas bastante tiempo mi incertidumbre

Y son esas sensaciones las que que los acompaaban de las gran- sobre si aquello que tanto pondera-

nos asaltan a los aficionados a des “majors”, como la Metro, la Fox ban mis mayores merecía la pena o íí
poco que seamos algo conscientes o Columbia—, un momento en el eran exageraciones. Felizmente lle-

cuando nos disponemos a ver una que no tenamos certeza alguna, gu a saber que sí lo merecía.

pelcula. ¿Merecer la pena? ¿Ti- pero s esperanza, a lo mejor porque Tras divagar un rato sobre la
raremos nuestro dinero, en el su- nuestros ojos y nuestras mentes enrevesada propuesta no sé muy

puesto que la visin sea tras pasar gozaban de un estado de virginidad bien si estas lneas se han acercado
í
por taquilla? ¿Me aportar algo? que, bien mirado, favoreca y de qu a lo solicitado. Pero como dijo muy
¿Habr perdido el tiempo, tan es- manera a nuestro posible disfrute.
bien Lope de Vega: “Un soneto me

caso en muchos casos y con tanto Pasados los aos, con muchas manda hacer Violante...” y “burla,

donde elegir?... Y as una serie de horas ante las pantallas, ese estado burlando” ah van estas lneas por
preguntas que muchos nos hace- de incertidumbre se ha moderado. delante. Aunque me quedo con mi

mos antes de tomar la decisin de
Lo que no sabra decir si es mejor
incertidumbre.

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