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Muchas gracias por tus amables ciado. Os iré enviando a G. Fatás y a ti fragmentario) sobre Julián, sin orden
palabras. Me han alegrado el día. Y me algunos retazos de mi relación personal.
congratula que participes de la conside- cronológico, a modo de anotaciones
Queridos Guillermo y Juan:
ración sobre el magisterio de don Julián, apresuradas o esbozos a vuela pluma,
al que conocí y tengo en gran admira- Os remito el borrador de mi pri-
con la voluntad de que más adelante

ción y afecto. Los diplodocus tenemos mera entrega de retazos, dedicados a puedan servir de cañamazo para tra-
el deber de conservar la memoria de Julián Gallego, en agradecimiento a zar un per l biográ co bien construi-
vuestros artículos del HdA. Yo voy a se-
nuestros mayores eméritos. Tú, que no do y de mayor aliento”.
eres mayor, pero sí emérito, lo compren- guir elaborando pequeñas anotaciones
derás mejor que nadie. Sobre todo lo de aspectos menos aireados de su traba-
Julián Gállego (Mis retazos, 1)
demás, mucho ánimo. Me acuerdo con jo intelectual y de sus dotes personales
gran cariño que presentaste mis “biznie- (si os interesan, os las seguiré enviando Con el madrugador acicate de los

tos gracianos”. Allí, en la Posada de las a los dos, en caso contrario, corto y cie- (.) textos que tanto Guillermo Fatás
Almas, que también es un diplodocus. rro). Un fuerte abrazo. Gonzalo M.
como Juan Domínguez Lasierra han

¡Ay! Un gran abrazo y muchos, muchos dedicado al “mítico Julián Gallego”
ánimos. Te queremos.
El jueves 17 enviaba ese primer en el Heraldo de Aragón con motivo
“retazo”: “Voy a seguir elaborando del centenario de su nacimiento en

La respuesta de Gonzalo no se pequeñas anotaciones de aspectos 1919, inicio estos retazos (todo cono-

hizo esperar:
menos aireados de su trabajo intelec- cimiento del otro es fragmentario)
tual y de sus dotes personales”. Lo sobre Julián, sin orden cronológico,

Muchas gracias por todo lo que que envió llevaba por título: “Julián a modo de anotaciones apresuradas
me recuerdas en tu correo, por tu cariño
Gállego y su contribución docente o esbozos a vuela pluma, con la vo-
permanente e invariable y por tus ener- universitaria a la recuperación crítica luntad de que más adelante puedan
gías positivas en estos momentos más
del arte español del siglo XIX”. El servir de cañamazo para trazar un
duros para mí. Y, desde luego, Julián
Gallego ha sido maestro, sabio y gran texto se anunciaba así: “. inicio estos per l biográ co bien construido y de
amigo personal, al que tanto he apre-
retazos (todo conocimiento del otro es
mayor aliento. GMBG.

Julián Gállego y su monografías de pintura francesa transformó la visión de nuestra

contribución docente contemporánea, lujosamente ilus- pintura del siglo de oro de realis-
universitaria a la recuperación tradas, de la editorial suiza SKIRA) ta en simbólica, tesis de la que

crítica del arte español del recuerdo cuando, recién editado, han vivido todos cuantos se han

siglo XIX
llegó a la rala biblioteca de la ocupado del tema después, tanto
cátedra de historia del arte de españoles como hispanistas, lo

Vaya por delante que, dejando nuestra universidad de Zaragoza, hayan reconocido o no.

aparte mi estrecha e inquebranta- su libro sobre Visión y símbolos No resulta, pues, sorprendente
ble amistad con el llorado profe- en la pintura española del siglo de que desde la Universidad Autóno-

sor Santiago Sebastián, que sobre oro, en la versión original francesa ma de Madrid, recién creada junto

todo en lo personal, pero asimis- de editorial Klincksieck, en el año con la Universidad Autónoma de
mo en la admiración académica, 1968, y que el profesor Abbad pu- Barcelona, asimismo en el año

no tienen parangón, siempre he so selectivamente en mis manos 1968, decisivo en la trayectoria del

tenido como referente primordial para que tuviese el privilegio de futuro profesor Julián Gállego, se
la obra de quienes considero, por ser su primer estudioso.
le ofreciese un contrato de cate-

clarividente sugestión de mi cate- Este libro, luego editado en drático de arte moderno y contem-

drático y director de tesis don Paco versión española por Aguilar en poráneo, junto a Joaquín Yarza,
Abbad, los tres grandes maestros 1972 ( y Cátedra, 1984), fruto de que se ocupó del arte medieval.

de la historia del arte español de diecisiete años de trabajo y sose- Debo reconocer que la labor

los últimos tiempos, con cuyos gadas lecturas en los ricos fondos docente universitaria de Julián
libros he cimentado mi formación de la Biblioteca Nacional de Paris, no ha trascendido de los ámbitos

como historiador crítico del arte: a la que Julián acudía de modo académicos, o al menos no tanto

Enrique Lafuente Ferrari, Juan An- regular todos los días (todo el como sus otros per les profesio-
tonio Gaya Nuño y Julián Gállego.
tiempo que le dejaban libre sus nales, y sin embargo ha tenido un

De mi primer encuentro aca- apasionadas visitas a exposiciones peso similar e incluso mayor en el

démico con Julián Gállego (con de arte y museos parisinos) es y contexto de una docencia cuyos an-
anterioridad tan sólo había leído seguirá siendo el mayor hito histo- ticuados programas de las asigna-

con delectación algunas hermosas
riográ co del arte español, ya que
turas de historia del arte concluían

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