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Artista invitado

Natalio Bayo

Una vida de color

Eugenio Mateo

Los grandes pintores lo son 40, a cultivar una pasión estética que su mirada permite escapar de las pe-

cuando su obra y estilo trascienden se sirve de la alegoría como proclama sadillas de una vida gris; la contun-

del soporte y crean una corriente ideológica para destacar visiones de dencia expresionista y social de sus
inmediata al ser reconocidos sin am- un mundo que hace suyo, y desde el principios. Es sugerente, conociendo

bages con una simple mirada. Es pri- que asoma una rebeldía que pre ere su trabajo, querer adivinar su evolu-

vativo de muy pocos a pesar de que la re exión a la reacción. Una sim- ción. Siempre una postura ética que
todos los artistas plásticos busquen bología que a lo largo de sus series se narra en secuencias de su tránsito

precisamente ser diferenciados por la acude a una guración amable y des- humano. La faceta del hombre com-

técnica, uso del color y composición criptiva, llena de matices: palomas prometido se cuela en su pincel para
de sus cuadros. Natalio Bayo (Épila como símbolo de libertad; caballos hacernos pensar con la belleza de sus

1946) es uno de aquellos.
con referencias del arte pop; San Jor- trazos. La pasión por su tierra se dis-

Natalio aplica una sabiduría ge y el dragón, jinetes con aureola de fraza con una galería inagotable de
natural a sus dos facetas vitales, la banderas barradas; personajes de un fantasía que no tiene fronteras.

profesional y la humana. El o cio de Renacimiento onírico y exuberante La prudencia en la manera de

pintar le ha llevado, desde su primera del que se impregnó en su estancia ser, la sencillez que huye de los focos,
exposición en 1969 y su paso por el italiana; iconos mutantes de un son atributos de los grandes y Nata-

aclamado grupo zaragozano Azuda
animalario surreal; damas a las que
lio Bayo es uno de ellos, no en vano

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